¿Cuál
es el gato encerrado?
Atraco en
Pudahuel da lugar a fundadas sospechas sobre la participación de grupos
subversivos.
Un número
aún indeterminado de elementos, actuó en este asalto a un transporte blindado
de valores. Lograron un botín estimado en $ 6.000.000.000 (seis mil millones de
pesos), monto que supera al llamado "robo del siglo" (2006) cuando
los delincuentes neutralizaron a los guardias del camión "Brinks"
funcionarios que custodiaban una gruesa suma de dinero ($ 870.000.000).
Entonces se comprobó que los hechores manejaban información confidencial.
Hoy se
presume lo mismo. Los sujetos portaban credenciales para tener acceso y al
parecer algún tipo de indumentaria apropiada para no llamar la atención de los
funcionarios de la Dirección de Aeronáutica Civil, DGAC, entidad a cargo del
terminal aéreo internacional de Pudahuel.
Es un
detalle ridículo. Pero la DGAC prohíbe el porte de armamento en la losa del
aeropuerto. Los hechos ocurren en el sector de carga y no en el de pasajeros.
Por el "protocolo" de marras, Carabineros, no tiene jurisdicción en
el sitio, y el personal de "Brinks", no pudo ingresar sus armas de
servicio; aunque, en el colmo de lo absurdo, la banda (serían 8), contaban con
al menos un fusil de campaña y armas de puño. No se registraron heridos ni
lesionados: otro antecedente importante.
Conocían
perfectamente el funcionamiento y la rutina, producto de una filtración o de un
estudio de campo. Para su huida utilizaron el acceso norte de Pudahuel, el que
según se sabe, es poco empleado. Recurrieron a distractores, incendiando un
vehículo en el kilómetro 10 de la Ruta 68 y al parecer otro móvil habría
corrido la misma suerte en un camino secundario en el sector de Lo Boza. Además
sembraron los consabidos "miguelitos" en la vía.
Dadas las
características del asalto, estamos ante un grupo entrenado, que contó con
información y/o estudió el lugar; tiene a su disposición armas automáticas,
elementos de apoyo y destreza en la acción.
En este
tipo de asaltos destinados a financiar la operación de movimientos u
organizaciones extremistas, se comprueba constantemente la aparición de fusiles
M16, mismos que fueron internados por Carrizal Bajo y que Luis Corvalán dijo
que, el Partido Comunista, los guardaba "por si las moscas"
El día
anterior (11) se conoció la "sentencia" de la Suprema al frentista
Enrique Villanueva por su participación en el asesinato del senador de la UDI
Jaime Guzmán Errázuriz. Dicho "comandante" juró (aunque nadie le
cree) que desconocía aquellos planes y tampoco "estaba de acuerdo"
con la fría ejecución del líder gremialista. El juez lo condenó a 5 años de
libertad "vigilada", equivalente a nada vista la gravedad del hecho.
Y ni siquiera se le agregó 1 día. Esta delicada atención del ministro en visita
Mario Carroza - se traduce en evitarle la cárcel efectiva por dos años y medio.
La defensa apeló de inmediato, dado el plazo previsto (24 horas), para
proceder.
¿No llama
la atención esta coincidencia? Porque cuando el lautarista Juan Aliste Vega,
fue condenado a 42 años de presidio (julio, 2), por el crimen del cabo de
Carabineros Luis Moyano y el homicidio frustrado de otro funcionario policial,
sus compinches hicieron explotar varias bombas. La serie de atentados culminó
(julio,14) al detonar una bomba en la Estación del Metro Los Dominicos. Después
de muchas vacilaciones el gobierno se decidió a invocar la Ley Antiterrorista.
Y ahora, frente
a las explosiones registradas horas antes de producirse el millonario asalto de
Pudahuel, en particular la bomba que destruyó el automóvil de un oficial de
Carabineros, a metros de la Primera Comisaría en Santiago Centro, La Moneda
anunció que se aplicará la misma normativa.
Raro,
porque en palabras de las actuales autoridades, en Chile NO hay terrorismo, al
menos NO en La Araucanía, donde una banda de asesinos quemó vivo, en su propia
casa, al matrimonio Luchsinger MacKay. Pero esa es nuestra realidad.
Ahora, el
ministro Rodrigo Peñailillo anuncia que no solo se modificaría la Ley
Antiterrorista, LAT. Sino que además, se estudia la completa reestructuración
de la Agencia Nacional de Inteligencia, ANI. Aunque claro. La LAT simplemente
no se aplica y está casi en desuso; en tanto la ANI es una nulidad en sí misma.
Porque entre otras razones, está impedida de investigar y solo recaba informes
¿el Gobierno querrá recuperar el rol de "La Oficina" (Dirección de
Seguridad Pública e Informaciones), creada en 1991, pero cuya ley fue publicada
recién en 1993 y fue la antecesora directa de la ANI?
Todo
parece indicar que para ese nuevo órgano, no estará disponible algún Marcelo
Schilling, que penetre estos grupos extremos. Tal vez haya alguien en
condiciones, que conozca el mapa de los ultras, sus capacidades políticas y
líderes. Porque lo que está claro es que crecen las sospechas sobre el alcance,
las redes y las complicidades de estas bandas cuyo nivel operativo, por lo
visto en Pudahuel, se comprueba intacto.
Desde
marzo, una treintena de artefactos explosivos fueron depositados en diversos
lugares. Cerca de la mitad de ellos fueron desactivados por el GOPE de
Carabineros. Es parte de la política desarrollada por el denominado
"anarquismo insurreccional" Un Informe elaborado en la administración
Piñera menciona el despliegue de "una nueva guerrilla urbana" en
Chile, señalando que se logró identificar una cincuentena de miembros de varios
de estos grupos nihilistas "anticoncertacionistas" sin vocería
representativa.
En cuanto
al Frente, Carroza en el juicio a Villanueva, tuvo a su disposición un Informe
de la PDI sobre la estructura rodriguista. Allí se señalaba, aparte de
identificar al mando militar de la época, que la primera línea del FMR estaba
compuesta por la Dirección Nacional, las Fuerzas Especiales y la Unidad de
Recuperación Económica. Sabemos los nexos del movimiento con figuras como
Michelle Bachelet, la que en la época del atentado al General Augusto Pinochet,
convivió con Alex Vojkovic, vocero del grupo, entre 1985 y 1987
("Bachelet, la Historia No Oficial" de Andrea Insunza y Javier
Ortega). La misma mandataria que declaró en Sudáfrica que "con Salvador
Allende tenemos los mismos desafíos" y luego habló del "legado de Allende"
matizando sus palabras con el concepto de "a través de una vía
pacífica"
Pero
¿Opera nuevamente la Unidad de Recuperación Económica? ¿Es otro téngase
presente del Partido Comunista al reformismo claudicante de los
concertacionistas?
¿Cuál es
el gato encerrado?