viernes, septiembre 14, 2007

Los emplazamientos presidenciales

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La imagen fué tomada de Canal 13 de T.V.
Al parecer nuestra Presidente, Michelle Bachelet Jeria, todavía no comprende cual es su trabajo, cuales son sus deberes ni cuales son las actividades que debe tener el Ejecutivo en sus relaciones con los otros poderes del Estado, sin entender tampoco el papel que corresponde a la oposición.

El último tiempo la Gobernante se ha caracterizado por ejercer como jefe de su coalición, cree que puede intervenir en las decisiones de los otros poderes, emplaza al Poder Judicial, ordena a los Parlamentarios e intenta, manejar por medio de recados publicitados a la oposición.

Señorita Presidente, su papel como Jefe de Estado consiste en administrar la Nación, proponer legislaciones, en especial las que implican costo, preocuparse de la honestidad de la administración y producir las circunstancias para que el país recupere la senda de progreso que se ha perdido.

Si no fuera por los inmensos recursos que han ingresado al país por los favorables precios del cobre, la celulosa, el molibdeno y otras materias primas de exportación, no nos cabe duda que la ciudadanía ya se habría dado cuenta de las enormes falencias e incapacidad de su gestión.

Donde uno meta las manos existe un nauseabundo olor a corrupción, que está mucho más extendida de lo que la opinión pública sospecha, o el aroma penetrante de la ineptitud y la incapacidad del equipo gobernante. Todo se ha tapado con una nutrida billetera en las manos desaprensivas de la Mandatario.

A pesar de las excepcionales condiciones de la Caja Fiscal, de la comodidad de tener una total mayoría en el Congreso y de contar con la obsecuencia del Poder Judicial, nuestros gobernantes no pueden demostrar un crecimiento aceptable, sus resultados son mediocres, más bien penosos.

Si hiciéramos el ejercicio de restar del crecimiento nacional el aporte extraordinario de los altos valores alcanzados por las exportaciones de materias primas, constataríamos, no sin consternación, que el crecimiento en los últimos 4 años se acerca más al cero que a las cifras que pomposamente publicitan.

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