viernes, abril 13, 2007

Libertades amenazadas.


13 de Abril de 2007.
Las declamaciones de anti imperialismo de las agrupaciones izquierdistas de nuestra América, gran parte de ellas en el Gobierno, como sucede en la Argentina, Uruguay, Brasil, Chile, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, entre otros, descansa sobre algunos mitos que es necesario aclarar.

Se declaran defensores de los intereses populares, entendiendo por pueblo sola a la fracción asalariada de este que está con ellos, cuándo en realidad son partidarios de un sistema totalizante que pretende que todo debe estar en manos del Estado, nada fuera de él, y han sido, tradicionalmente, defensores de las dictaduras del proletariado impuestas a sangre y fuego.

De manera permanente aseguran ser anti fascistas, en circunstancias de ser los defensores inquebrantables de las tiranías de Fidel Castro, en la isla mártir de Cuba, o del pintoresco dictador que se ha apoderado del poder en Venezuela. Ambos tiranos, aunque lo nieguen, hacen esfuerzos por extender sus revoluciones al resto de nuestro continente.

Como es obvio, el esfuerzo mayor lo realiza el pueblo venezolano, debido a los serios problemas de salud de Castro y las miserables condiciones económicas del paraíso comunista, con el financiamiento, gracias a los altos precios de petróleo, de cuánto grupo extremista que exista y con la conformación de siniestros grupos bolivarianos que dependen de las legaciones diplomáticas (¿?) de ese país.

Permanentemente se manifiestan a favor de la defensa de políticas de desarrollo sustentable y ecologistas a ultranza, pero llegado el momento nada hacen por sustituir las fuentes energéticas altamente contaminantes, además de ser las causantes del efecto invernadero y de los cambios climáticos, bombardeando de paso toda iniciativa que lleve a buscar energías más limpias.

El oro Castro-chavista ya ha comprado a grandes cantidades de parlamentarios marxistas, aunque convenientemente disfrazados de demócratas, los que han iniciado la tétrica maniobra de adormecer las conciencias de los incautos ciudadanos, preparando, ciertamente, un golpe de mano que les permita reemplazar a los grupos “dominantes”, por la nueva clase social conformada por ellos mismos.

Muchos gobernantes, como el aprendiz de tirano de Argentina, simplemente subsisten en el poder gracias a los salvavidas financieros de Chávez, que sin duda serán pagados a precio muy alto, con las libertades, por su pueblo. Bolivia y Ecuador se pueden considerar perdidos a manos de los rojos. El resto de los gobiernos izquierdistas, camuflados de demócratas, siguen preparando las condiciones objetivas que produzcan un estallido social que les permita establecer nuevos gobiernos, ahora, simplemente totalitarios.

Ya hemos sido engañados de manera permanente, es hora de que comencemos a despertar y de que la gente libre comience a defender los valores verdaderos que dan fuerza a la democracia.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lamentablemente es cierto, las libertades están amenazadas por el totalitarismo subyacente en la coalición de gobierno.
LGC